“¿Qué, pues, haréis cuando llegue el fin?” (Jeremías 5:31)
“He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.” (2 Corintios 6:2)
“Porque no quiero la muerte del que muere, dice el Señor; convertíos, pues, y viviréis” (Ezequiel 18:32)
Enfermedades, pandemias, muerte, dolor… El mundo se ve azotado por muchos males, que caracterizan estos últimos tiempos.
Muchos preguntan: ¿Dónde está Dios que permite que pasen estas cosas?
Otros dicen: ¡Todo esto que pasa es un castigo de Dios! ¡Dios está castigando a la humanidad!…
El hombre no debe sacar sus propias conclusiones, sino buscar la interpretación correcta en la Palabra de Dios, porque las cosas no son como generalmente se piensan
Dios está siempre como el salvador (conservador) de todos los hombres, mayormente de los que creen (1 Timoteo 4:10) Haciendo salir su sol sobre justos e injustos (Mateo 5:45) Pero el hombre lo sacó de su ámbito, diciendo: “No queremos que este reine sobre nosotros” (Lucas 19:14)
Habiendo quedado el hombre bajo el maligno (1 Juan 5:19) ¿Es de extrañar que sufra, se engañe y vaya de mal en peor?
Dios, aún en su amor, espera que el hombre se vuelva a él para perdonarlo y darle vida eterna. No está en este momento castigando al mundo. El mundo se castiga solo bajo los efectos de su pecado.
Hoy Dios está llamando a los hombres a la salvación. Sin embargo, pronto, se terminará esta gracia. Y todos aquellos que no hayan arreglado sus cuentas con Dios aceptando a Cristo como Salvador, tendrán que ser castigados; con un castigo mucho mayor a todo cuanto puedan sufrir ahora.
Pensamientos para reflexionar