
Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.(Josué 1:8)
“Porque aquel que a Dios teme, saldrá bien en todo” (Eclesiastés 7:18)
Las compañías de seguro dicen: Si se puede evitar no es un accidente… En el sentido espiritual muchas veces pensamos en estas cuestiones, pues siempre se dice que para los creyentes, el pecado debe ser algo accidental, no premeditado ni mucho menos un hábito. “pues el que es nacido de Dios no tiene como práctica habitual el pecado” (1 Juan 5:18)
En esta vida, sobre este mundo que está bajo el maligno hay muchas cosas que no podremos evitar que sucedan, pues son las consecuencias lógicas del pecado en el mundo que afectan a justos e injustos indistintamente. Pero, hay otras cosas que nos suceden y que podríamos haber evitado. Por Eso la Biblia dice: ¿No te acarreó esto el haber dejado a Jehová tu Dios, cuando te conducía por el camino? (Jeremías 2:17) Ante lo cual exclamamos: ¡Qué verdad tan grande! Pues no fue accidental, sino el haber desoído la voz de Dios.
La Biblia, es el libro de Dios en el cual están todas las advertencias, para que aprendamos las cosas por su Palabra y no a través de las experiencias. Si se lee la Biblia y se obedece a lo que Dios dice y enseña en ella, todo sale bien. No estaremos exentos de contratiempos, ni de sufrir algunas aflicciones (Juan 16:33) pero cuando suframos no estaremos solos, pues el Señor estará con nosotros y finalmente todo nos saldrá bien.
Pensamientos para reflexionar