
Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. (Isaías 55:6.7)
“Es el tiempo de buscar a Jehová” (Amós 10:12)
Es sorprendente como las personas basan la seguridad de sus almas eternas en suposiciones, en ideas que forman, basados en su imaginación, y todo, por no querer aceptar lo que dice la Palabra de Dios.
Muchos, al pensar en la vida después de la muerte, se imaginan que pasar a la eternidad sin Dios, será ir a un sitio en donde al menos no se encontrarán solos. Se consuelan pensando que irán a un lugar donde seguirán con los mismos gustos y las mismas pasiones que cuando estaban sobre la tierra, rodeados de conocidos y de todo aquello que amaron. ¡Eso es un error! En el más allá no habrá goces para la carne, porque el pecado y los deseos carnales, no seguirán estando en el hades; ni en el lago de fuego que es el destino final de todos aquellos que rehúsan creer en el Hijo de Dios.
Dios describe al lugar de tormento eterno, como un lugar donde el gusano no muere, (figura del remordimiento, de algo que aflige interiormente a las personas) y el fuego nunca se apaga (figura de aquello que atormenta y espanta desde el exterior) donde todos estarán rodeados del mismo tormento y angustia, llenos de espanto y desesperación. (Marcos 9:44)
Por eso la Biblia dice que ahora es el momento de buscar a Dios, de aceptar a Cristo como Salvador, luego, será demasiado tarde.
Pensamientos para reflexionar