EL MENSAJE DE OSEAS (Parte 2)

“Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré” (Jeremías 15:19)

“Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto” (Oseas 2:15)


Las viñas prefiguran el gozo, pues desde las viñas proviene el vino, símbolo del gozo del hombre en las Escrituras. Las viñas son prometidas por Dios y garantizadas en el “valle de Acor” dado como puerta de su esperanza.

Ese valle de Acor, nos trae a la memoria cuando Israel había pecado ante Dios y era presa de sus enemigos. La sentencia de Dios había sido directa: “Israel ha pecado y han quebrantado mi pacto” (Josué 7:11) Allí juzgaron el mal y aquel que había hecho caer a Israel a causa de su pecado, fue llevado al valle de Acor para ser apedreado. (Josué 7:24,26)

El valle de Acor es donde se juzgó el mal para que Dios perdonara y todo cambiara.  Ese suceso de Israel en tiempos de Acán y el juicio por el pecado, nos hacen pensar en Cristo. Pues él murió por nuestros pecados y el valle de Acor para nuestro Señor, fue la cruz del calvario.

¿Podrá quien haya pecado, volver a estar en paz y vivir feliz en la presencia de su Señor? Sí, verdaderamente. Si se arrepiente y confiesa su pecado. Pues Dios le dará nuevamente sus viñas, su gozo; basando su perdón en el sacrificio de Cristo, para que vuelva a ser como antes, como en los días de su juventud, como cuando recién había conocido a Cristo, prefigurado, en cuando había sido redimido de Egipto.


Pensamientos para reflexionar

www.lacuevadeadulam.com.ar  weblacuevadeadulam@gmail.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *