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“Habló Jehová a Moisés y a Aarón en la tierra de Egipto, diciendo: Este mes os será principio de los meses; para vosotros será éste el primero en los meses del año. Hablad a toda la congregación de Israel, diciendo: En el diez de este mes tómese cada uno un cordero según las familias de los padres, un cordero por familia” (Éxodo 12:1-3)
“De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” (2 Corintios 5:17)
Hubo un momento en la historia de Israel en la cual se les dijo: “Este mes os será principio de los meses; para vosotros será éste el primero en los meses del año” (Éxodo 12:1) y esto era porque todo comenzaba de nuevo con la redención. El capítulo 12 del libro del Éxodo nos habla del cordero de la pascua, figura de Cristo, el cordero de Dios que quita el pecado del mundo (Juan 1:29)
Comenzamos un año más sobre esta tierra donde el tiempo se mide en años. Todos los seres humanos comienzan el año con grandes expectativas y uno quisiera que a todos les vaya bien. Hay una forma de que esto se cumpla, y es, que este sea el año de su redención, el principio de una nueva vida reconciliados con Dios.
Los israelitas, comenzaron a contar de nuevo luego de haber comido el cordero de la pascua. Hoy se puede empezar de nuevo si se recibe a Cristo como salvador.
Seguramente, quienes leen esto y aún no tienen a Cristo como salvador, postergaron muchas veces esa decisión no queriendo pensar seriamente en eso. Más, ahora, con todo el amor de Dios le rogamos que lo piensen y se rindan a los pies de Cristo, quien los está esperando con los brazos abiertos.
Ahora es el momento no solamente de comenzar un nuevo año, sino de comenzar una nueva vida.
Pensamientos para reflexionar
