Todos los escritos“El que ama al prójimo, ha cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor” (Romanos 13:8-10)
Todo cristiano ha pasado de la muerte espiritual a la vida. (Efesios 2:1) Tiene al Espíritu Santo morando en él (Romanos 8:9) Es guiado por ese Espíritu (Romanos 8:4) Y es un ser que tiene la capacidad de amar, no porque ahora se porta bien y se esfuerza, sino porque el amor de Dios ha sido derramado en su corazón por el Espíritu Santo. (Romanos 5.5)
El amor, es el signo distintivo del cristiano. Dios tiene virtudes y cualidades excelentes que le son esenciales, por ejemplo: Él es misericordioso, justo, santo, luz, amor… pero, justamente éste último atributo divino: “Dios es amor” (1 Juan 4:8) Es el que el Señor, dijo que debe caracterizarnos. “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros” (Juan 13:35)
No olvidamos que él nos manda a vivir santamente en justicia, etc. pero siguiendo la verdad en amor (Efesios 4:15) No guardando tres o cuatro puntos de la doctrina, sino toda la Palabra.
El cristiano no debe apartar tres o cuatro puntos por doctrinales que fuesen y separándolos del resto de la Palabra, enfatizar únicamente en ellos, colocándolos como base de su comunión cristiana. Sino guardar toda la Palabra, andando en amor. Ya que la santidad sin amor, no es santidad sino legalismo, y el amor que sobrepasa lo que dicen las Escrituras tampoco es amor (1 Corintios 13:5)
Pensamientos para reflexionar
