“El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo” (Proverbios 18:24)
“Hierro con hierro se aguza; Y así el hombre aguza el rostro de su amigo” (Proverbios 27:17)
La amistad es uno de los bienes más preciados que podemos tener, y todas las personas que Dios puso en nuestro camino para unirnos en amistad, son un regalo del cielo.
Suele decirse, que un amigo, es quien conociéndote y sabiendo todo en cuanto a tu persona, igual sigue queriéndote, y sigue estando siempre presto para ti.
La Biblia dice: “En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia” (Proverbios 17:17)
También suele decirse: “la familia no se elige, los amigos sí” Esto nos recuerda la responsabilidad que tenemos en cuanto a nuestros amigos.
Amnón, “hijo de David” tenía un amigo que se llamaba Jonadab… hombre muy astuto” (2 Samuel 13:3) Quien lo aconsejó para mal, y lo llevó a la ruina.
En cambio, de Abraham está escrito: “Abraham creyó a Dios… y fue llamado amigo de Dios” (Santiago 2:23) Esta es la amistad que conlleva bendición.
¿Quién es tu amigo?
“Hay un amigo más unido que un hermano” (Proverbios 18:24) Este amigo es el Señor Jesús. Porque “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” (Juan 15:13)
Él puso su vida por nosotros, padeció en nuestro lugar, murió por nuestros pecados…
Cristo es nuestro amigo fiel. Él, nos conoce mejor que nadie y siempre está con nosotros” (Mateo 28:18)
Pensamientos para reflexionar
