EN TU MANO ESTÁN MIS TIEMPOS

“Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir” (Eclesiastés 3:1,2) “Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano Leer más…