SANTIDAD

“Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir” (1 Pedro 1:14,15)


La SANTIDAD  tiene muchas malas interpretaciones. Algunos piensan que deben ser SANTOS para ser SALVOS. Cuando la Biblia nos enseña que, somos SANTOS, cuando somos SALVOS. No es para serlo, sino porque lo somos.

Algunos creen que ser un SANTO es ser una persona notablemente buena, o que SANTOS son aquellos canonizados por el hombre, a los cuales se les atribuye una piedad superior y acciones milagrosas.

La Biblia nos enseña que SANTO, es aquello que ha sido SANTIFICADO, y que SANTIFICAR,  es la acción de colocar algo aparte, separándolo para Dios.

En ese sentido, tenemos dos aspectos de la SANTIDAD en el cristiano renacido.

SANTIFICACIÓN DE POSICIÓN, que es una SANTIDAD ETERNA, realizada en Cristo Jesús, por lo cual, cuando creímos, hemos sido puesto aparte para Dios.  “Mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo” (Hebreos 10:10, 13:12)

Y la SANTIFICACIÓN PRÁCTICA que es una SANTIDAD EXTERNA. La cual  se ve en nuestra conducta y se produce en nosotros, a través de la obra del Espíritu Santo y la Palabra, que nos  separan de todo aquello que no concuerda con la SANTIDAD DE DIOS. (Juan 17: 17)

Debido a estos dos aspectos de la santidad, es por lo que se nos dice  que: somos santos, pero, además, que debemos serlo. Es decir, seguir la Santidad en todos sus aspectos. (Colosenses 1:2-4,  1 Pedro 1:1,16)


Pensamientos para reflexionar

www.lacuevadeadulam.com.ar  weblacuevadeadulam@gmail.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *